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| Zdének Zeman. |
Zdenek Zeman nació y
creció en Praga, formándose como jugador de fútbol en la cantera de uno de los
equipos capitalinos, el Slavia de Praga. Su tío, Cestmír Vyckpalek, ex jugador
de la Juventus y entrenador del Palermo, recibía cada verano las visitas de su
sobrino. En 1968, durante una de esas visitas, la URSS invadió Checoslovaquia
para sofocar la conocida como Primavera de Praga, por lo que Zeman se quedó a
vivir en Palermo con su tío. Allí, estudió Educación Física, licenciándose con
una tesis sobre medicina deportiva y además
empezó a entrenar a equipos juveniles y del sur de Italia.
En 1989, Zeman cogió
el timón del Foggia Calcio. En ese momento el equipo estaba en la Serie B. En
su segundo año, el "Foggia de los milagros”, como popularmente se le
conoce, consiguió el ascenso a la Serie A, fruto de un fútbol alegre y vistoso,
en donde destacó un joven Giuseppe Signori -a quien Zeman convenció para jugar
de delantero-. En la máxima categoría italiana, los resultados fueron muy
positivos. El primer año después de ascender, el equipo cosechó su mejor
resultado en Serie A con un noveno puesto, y además fue el segundo equipo más
goleador con 58 goles en 34 partidos. El segundo año en Serie A, fue más
difícil, pues con la salida de los mejores futbolistas del plantel, el equipo
bajó su rendimiento, finalizando la temporada en decimoprimera posición.
Finalmente, en su tercer año, el equipo volvió a mejorar e incluso estuvo a
punto de clasificarse para la Copa de la UEFA.
Tras esas 3 temporadas en el Foggia, Zeman captó
la atención de la Lazio, donde estuvo a punto de hacerse con el Scudetto,
aunque finalmente sería cesado en su tercera temporada. Allí, coincidió con un
joven Alessandro Nesta, impulsando su carrera. La temporada siguiente de ser
cesado, Zeman cambió de acera y tomó las riendas del otro rival capitalino la
Roma, donde jugaba un joven Francesco Totti.
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| Zeman en su etapa en la Roma. |
El 25 de junio de
1998, en una rueda de prensa, Zeman, ante la pregunta de un periodista sobre
qué era lo que no le gustaba del fútbol en Italia, contestó "el abuso de
fármacos, el fútbol tiene que salir de las farmacias", y aseguró que sabía
que los jugadores de la Juventus tomaban 40 gramos de creatina al día. A raíz
de estas acusaciones, se comenzó una investigación sobre el uso de dopantes en
el fútbol italiano. Según la sentencia del juez, los jugadores de la Juventus
consumieron EPO, cometiendo un "fraude deportivo continuado" entre
1994 y 1998. A pesar de la sentencia, ni el equipo ni los jugadores sufrieron
sanción alguna salvo el médico.
Zeman opina que
sus declaraciones supusieron una grave penalización para su equipo, lo que
explica que finalmente, y a pesar de haber llegado a un principio de acuerdo
con el presidente de la Roma para su renovación, éste decidiera finalmente no
renovarle. Después de la Roma, Zeman siguió entrenando a equipos como el
Fenerbahçe, Napoles o Lecce, pero sin ningún éxito reseñable.
Tras varios años a la
sombra del panorama futbolístico, en 2012 Zeman volvió a aparecer para ascender
a la Serie A al Pescara, un equipo repleto de jóvenes talentos como Verratti,
Inmobile o Insigne. Ese año, su equipo acabaría siendo el máximo anotador de
las competiciones italianas superando con 89 goles los 68 tantos anotados por
la Juventus campeona del Scudetto. Esta actuación le devolvió la confianza de
un grande, la Roma que durante el verano siguiente confirmó su fichaje, aunque
los malos resultados, y algunos roces con la directiva y algunos jugadores de
gran peso en el vestuario como De Rossi, propiciaron su destitución antes de
acabar la temporada. La temporada pasada volvió a entrenar a un equipo de Serie
A, el Cagliari, que le destituiría a finales de diciembre, para, en una de esas
tantas peculiaridades que tiene la liga italiana, volver a contratarlo.
Finalmente el equipo, fruto de los malos resultados durante toda la campaña,
descendió.
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| Zdének Zeman. |
Sus planteamientos
atrevidos se traducían en partidos divertidos con una gran cantidad de
ocasiones para ambos bandos, motivo de alabanza para unos y de críticas para
otros, pues eran muchos los que definían sus tácticas de ingenuas ya que al
final le costaban más puntos de los que le daban, algo que sin embargo, dotaba
de cierto romanticismo a sus equipos. Zeman ha sido, dada la peculiaridad de
sus planteamientos en un fútbol como el italiano, y su polémica al destapar el
dopaje, uno de los grandes personajes
del fútbol transalpino.
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